Cientos de personas comenzaban a congregarse este mediodía en Puente Salguero, esperando el paso del cortejo fúnebre que lleva los restos de Néstor Kirchner al aeroparque metropolitano Jorge Newbery para su entierro en su ciudad natal de Río Gallegos.
Los primeros en llegar fueron los habitantes de la Villa 31, lindera al puente Salguero, y del exclusivo Barrio Parque, aunque también comenzaban a llegar de localidades del conurbano bonaerense como Malvinas Argentinas.
En promedio, según informó la Comisaría 53, a cargo del operativo de seguridad en esa zona, se asignaron 20 policías por cada cuadra.
En el camino que recorre el cortejo fúnebre se pueden ver carteles en todos los puentes con la leyenda "Néstor con Perón, el Pueblo con Cristina", en letras negras.
Este último tramo del recorrido del cortejo fúnebre hacia el aeroparque se caracteriza por el gran contraste que determina la convivencia de dos barrios, uno muy exclusivo y otro con viviendas más precarias, y un imponente centro de compras.
Florinda Quisper, de 54 años, vecina de la Villa 31, dijo a Télam que estaba allí porque se quedó "con ganas" de ir a la Casa de Gobierno a despedir a Kirchner, a quien consideró "un símbolo de la Argentina, porque ayudó mucho a la gente".
"Una vez le envié una carta a (la presidenta) Cristina (Fernández de Kirchner) pidiéndole ayuda económica para comprar materiales para construir mi vivienda. Tuve el honor de recibir un llamado de su secretario en respuesta a mi pedido", recordó Florinda.
Beatriz Apanielli, de 72 años, vecina de Malvinas Argentinas, consideró que "los argentinos" habían "perdido la ilusión" y ahora, "gracias a Néstor hasta tenemos jubilación".
"Tengo una máquina de coser, posiblidad de trabajo, tarjeta de crédito que antes no tenía y un futuro para mis nietos", dijo Beatriz, que también remarcó que en el 2003 consiguió trabajo y gracias a eso hoy toda su familia puede comer.
Margarita Osorio, de 75 años, vecina de la Villa 31, se manifestó "orgullosa" de Cristina, a la que llamó "mi presidenta", y señaló: "Las mujeres tenemos el carácter suficiente para manejar un país".
Pedro Gutiérrez, de 70 años, vecino de Barrio Parque, dijo que estaba allí "de casualidad" en reconocimiento del ex presidente, pero se quejó que "todavía" no dieron "el aumento del 82 por ciento móvil (del sueldo mínimo) de jubilación".
La respuesta de Beatriz mostrando la otra cara del reclamo no se hizo esperar: "No es así porque yo ahora tengo una jubilación y antes ni siquiera tenía eso".
Hasta el momento, los automóviles transitan con normalidad, cuando todavía faltan unas horas para que pase el cortejo fúnebre.
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